Bogotá, Agosto 23 de 1999
Señor:
Yamid Amat
R@dionet
La Ciudad
Respetado maestro:
"Es preferible tirar para amar que tirar a matar"
decía en el prólogo del libro El Espíritu Erótico, en el año 90, cuando la
barbarie terrorista pretendía acabar con el amor.
El 9 de IX de 1990, por la mañana, usted entrevistó al poeta
Jotamario, cómplice del libro, y éste leyó el poema "La Burrita" de
Raúl Gómez Jattin, poema caracterizado por la irreverencia, el humor, la
inteligencia y el arte de un gran poeta.
Hoy, nueve años después, la barbarie de la estupidez humana,
disparó contra Jaime Garzón con el fin de tratar de matar lo que mas estimamos
los humanos: la libertad, la inteligencia, el humor, la velocidad mental, la
sencillez y la bacanería.
Como réplica a los asesinos de la paz y a los matones de
diferentes calañas, le proponemos, fuera de concurso, la realización de dos
monumentos conmemorativos a la memoria de Jaime Garzón y a Heriberto de la
Calle para ser ubicados en los siguientes sitios:
En el sitio de su asesinato, una estatua en bronce,
naturalista, que represente la sicología de Jaime, su interioridad, su alma y
que capte sus rasgos característicos y fisonómicos.
En la plaza del barrio La Perseverancia, raíz del pueblo
colombiano, una escultura en bronce de Heriberto de la Calle, que lo represente
en la actitud característica de embolar a uno de sus entrevistados, cuya silla
se encuentre desocupada para que allí se sienten todas las personas deseosas de
compartir su presencia perenne.
Alejandro Hernández, graduado en escultura de la Academia de
Bellas Arte de Florencia y autor de la más representativas obras conmemorativas
en Colombia como son la estatua del doctor Luis Carlos Galán, ubicada en la
plazoleta del Concejo de Bogotá; el homenaje al torero Pepe Cáceres, ubicada en
la Plaza de Toros de Santamaría; el busto de general Santander, que se
encuentra en diferentes ciudades del mundo, son algunas de sus obras más
conocidas.
En mi calidad de representente del maestro Alejandro
Hernández le informo que él está dispuesto a no cobrar un sólo centavo por la
realización de la obra, pues es un homenaje a uno de nuestros grandes
colombianos.
Los costos de fundición se podrían financiar con donaciones
de llaves y artículos de bronce en desuso, en cuyo caso sería financiado por el
pueblo colombiano y no por empresas comerciales que se quieran aprovechar de la
coyuntura de este repudiable asesinato.
Le vamos a dejar copia de esta propuesta a nuestro amigo
Jorge Consuegra, por si acaso esta misiva se extravía.
Atentamente,
Fernando Guinard
Ver más en :
http://www.museoarteeroticoamericano.org/homenajeajaimegarzon.html
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